Este tipo de tecnología proporciona bases de datos compartidas de forma descentralizada, segura y rápida a través de ordenadores desplegados en diferentes puntos.
Durante los últimos años el blockchain ha irrumpido como una de las tecnologías más innovadoras y disruptivas, revolucionando la forma en que se gestionan, almacenan datos y se hacen transacciones en la era digital.
Su salto ‘a la fama’ vino de la mano del bitcoin y las criptomonedas; sin embargo, su popularidad se ha ido extendiendo a pasos agigantados gracias a la seguridad y transparencia que aporta este sistema, abriendo así sus posibilidades de uso más allá de las finanzas a campos como la atención médica, propiedad intelectual o cadenas de suministro. A pesar de esto aún existen muchas interrogantes acerca de qué es el blockchain y para qué sirve.
Blockchain o cadena de bloques, qué es y qué tipos existen
El blockchain, que significa literalmente cadena de bloques, es una estructura descentralizada segura y rápida que utiliza bloques enlazados. Destacan por ser resistentes a la manipulación y la falsificación. Se trata de una tecnología que proporciona una base de datos compartida, a la que tienen acceso sus participantes, quienes pueden verificar y conocer cada transacción realizada.
El blockchain se puede comparar con un gran libro contable, inmodificable y compartido entre usuarios, donde van realizando registros una gran cantidad de computadoras, de forma simultánea, creándose un registro inmutable de sus transacciones.
Básicamente, cuando un miembro hace una transacción, esta crea una serie de datos que se almacenan en uno de los bloques. Al completarse se acopla a la cadena de bloques ya existente o blockchain y, para poder actualizarlo, se necesita el consenso de los participantes. En este sentido, la principal diferencia entre blockchain y un servidor tradicional de almacenamiento de datos es que el blockchain se ejecuta en diversos ordenadores desplegados por todo el mundo y no en un único sitio.
Tipos de Blockchain
La tecnología blockchain ha evolucionado a pasos agigantados durante los últimos años. Su potente capacidad de innovación en procedimientos de gestión y almacenamiento de datos no ha pasado desapercibida tampoco para gobiernos y empresas del ámbito privado, quienes han querido implementar redes restringidas.
Actualmente existen principalmente cuatro tipos de blockchain, en base a dónde y quién puede acceder a ellos:
- Pública. Bitcoin es uno de los casos más conocidos. Su carácter público se lo otorga el ser accesibles para cualquier usuario en el mundo que disponga de una computadora e internet.
- Privada. A diferencia de la anterior, para acceder a ellas se depende de una unidad central de una empresa, una entidad o una persona. Un ejemplo de este tipo de blockchain es la red Hyperledger, Corda o Quorum.
- Híbrida: tiene elementos de las dos anteriores. Aquí las entidades pueden generar un modelo privado que requiera permisos combinado con otro público, como es el caso de la blockchain híbrida XinFin.
- Federado: cuando el proceso de consenso es gestionado por un grupo preseleccionado de nodos o partes interesadas.
Ser capaz de liderar la transformación digital en organizaciones privadas o públicas y aplicar alguno de estos modelos es posible para aquellos profesionales que parten de un perfil relacionado a la ingeniería o licenciatura en materia industrial, informática, telecomunicaciones o estudios afines.
No obstante, para ser capaz de proponer soluciones de optimización a entidades se requiere contar con estudios especializados como la Maestría en Industria 4.0 de UNIR Ecuador, reconocida por la SENESCYT, con la que aplicar tecnologías como el blockchain, big data, ciberseguridad….
¿Cómo funciona el Blockchain?
Para hacerse una idea de cómo funciona el blockchain, un buen método es imaginarse un libro contable, donde se anotan todas las entradas y salidas de dinero. Este libro está integrado por cadenas de bloques, que tienen información codificada de una transacción en la red y al estar encadenados posibilita la transmisión de datos, a través de un código seguro.
Cada bloque que se adiciona hace más fuerte la verificación del anterior y sigue reforzando toda la cadena. De esta forma se consigue que la cadena de bloques sea a prueba de manipulaciones y asegure un espacio seguro y confiable.
La diferencia más remarcable de este modelo es que no hace falta un tercero que certifique la información, sino que la misma se disemina en múltiples nodos independientes (computadores conectados a la red) e iguales entre sí que la analizan y validan sin conocerse entre ellos.
La información registrada no puede eliminarse, solo añadirse otra nueva, ya que los bloques están enlazados mediante un cifrado criptográfico que imposibilita cambiar datos de un bloque anterior a la cadena.
Los principales elementos del Blockchain
Elementos del blockchain:
- Bloques. Cada vez que se realiza una transacción, esta se queda en una especie de pausa hasta que hay suficientes transacciones y se conforma un bloque de datos. Cada bloque está conectado por un código alfanumérico con el anterior y el posterior. Estos bloques van creando una cadena de datos que se unen de forma segura, registrando el tiempo exacto y las secuencias de transacciones almacenadas y compartidas.
- Mineros. Son computadoras que se encargan de corroborar todas las transacciones.
- Nodos. Es una parte fundamental en el blockchain. Son computadores que funcionan como punto de conexión, es decir, construyen la infraestructura de la red descentralizada manteniendo el consenso y la seguridad, al validar las transacciones y supervisar la actividad.
Blockchain ofrece ventajas clave como la seguridad y la descentralización que hacen posible realizar transacciones seguras y verificables sin intermediarios, lo que reduce fraudes y permite hacer un seguimiento preciso de todo el recorrido de la información. Por esto, aprovechar estas ventajas que impulsan la eficiencia y confianza en diversas industrias como las finanzas, salud y logística, pasa por contar en cualquier organización con profesionales idóneos en la materia.