Ignacio Hierro, director ejecutivo de Calidad de UNIR, ofrece en este artículo una visión certera de lo que ha supuesto el II Seminario Internacional: Calidad y Acreditación Universitaria en América Latina; los objetivos cumplidos y el camino para alcanzar el éxito.
La Universidad de Guayaquil ha sido durante dos días el centro del diálogo sobre el papel de la evaluación de la calidad de la Educación Superior, con la participación de 5.000 personas de 15 países y las ponencias de 25 autoridades académicas y regulatorias de 8 países iberoamericanos.
El Seminario se ha articulado en torno a un título conciso con un objetivo claro: la evaluación de la calidad como instrumento clave para generar confianza y reputación en la construcción de un espacio de educación superior iberoamericano.
Las mesas redondas en las que se han dividido las dos jornadas del Seminario han servido a dos propósitos: identificar los distintos actores clave en la definición y fortalecimiento de ese espacio de educación superior y clarificar el papel que representa cada uno de ellos en la consecución de ese objetivo.
Todos los actores coinciden en que la calidad es responsabilidad última de las universidades, pero ninguna institución ni ningún país vive únicamente en los límites de su jurisdicción
Cada grupo de interés ha tenido la oportunidad de presentar su visión y su contribución a la construcción de ese espacio de educación superior desde experiencias y buenas prácticas reales, mostrando a la vez una clara división del trabajo en un contexto de cooperación institucional.
Todos los actores coinciden en que la calidad es responsabilidad última de las universidades, pero ninguna institución ni ningún país vive únicamente en los límites de su jurisdicción. La internacionalización de la educación superior obliga a todos los actores a dar soluciones a las demandas constantes que plantean los nuevos perfiles de estudiantes que quieren mejorar su formación a lo largo de toda su vida para responder a empleadores y mercados laborales que, por su parte, están en una continua redefinición de competencias y aprendizajes.
Ignacio Hierro, director ejecutivo de Calidad de UNIR, en el Seminario de Guayaquil.
En este entorno de un dinamismo extremo, los sistemas de evaluación de la calidad tienen que repensarse radicalmente para mantener su responsabilidad de asegurar la calidad de títulos e instituciones sin suponer un freno ni a las exigencias de la sociedad ni a la innovación con la que las universidades responden a dichas demandas.
Pasos decisivos para la calidad y la acreditación
Iniciativas como el sello KALOS de calidad de la educación virtual, a cargo de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) o el sello de acreditación institucional SOFÍA de la Fundación madri+d, demuestran cómo los instrumentos de evaluación de la calidad sirven al propósito de articular alianzas universitarias internacionales basadas en un indicador de reputación internacional.
Por otra parte, las intervenciones de la responsable del Instituto de Educación Superior de América Latina y el Caribe (IESALC-UNESCO) o del Ministerio de Educación del Uruguay han trasladado un mensaje de optimismo a la hora de realizar lecturas flexibles a la movilidad transnacional de egresados y profesionales que invitan al optimismo en el corto plazo para poder hablar de un espacio real, según subrayó Pablo Beltrán, presidente del Consejo de Educación Superior (CES) del Ecuador.
El espacio iberoamericano de la enseñanza terciaria es percibido como una realidad, pero que requiere de un apoyo constante por parte de todos los sectores implicados
El Seminario Internacional de Calidad de Guayaquil ha demostrado, ante un total de 5000 representantes de universidades, organismos gubernamentales y agencias de calidad inscritos en el evento, que el espacio iberoamericano de la enseñanza terciaria es percibido como una realidad, pero que requiere de un apoyo constante por parte de todos los sectores implicados.
Pablo Beltrán, presidente del Consejo de Educación Superior (CES) del Ecuador, con Ana Capilla, directora de Educación y Ciencia de la OEI, interviniendo online en una mesa redonda.
El éxito del Seminario ha sido posible también gracias a la participación activa de un número importante de responsables de la educación superior y autoridades académicas del Ecuador, desde de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (SENESCYT), la presidencia del Consejo de Educación Superior (CES), la presidencia del Consejo de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior (CACES) y de 5 rectores de universidades del Ecuador. Con su implicación, estas autoridades han demostrado también que el éxito del Seminario sirve a los propósitos de la mejora de la calidad universitaria nacional pero también a la consolidación de ese espacio de educación superior iberoamericano como pretendíamos en el objetivo inicial del este evento.