El médico paliativo se encarga de proporcionar los cuidados necesarios a las personas con enfermedades graves, así como el bienestar necesario frente a los efectos secundarios de la enfermedad.
El médico paliativo es un profesional sanitario dedicado al tratamiento de los pacientes con una enfermedad potencialmente mortal. Es el encargado de un tipo especial de cuidados dirigidos a proporcionar bienestar y confort tanto al paciente terminal como a sus familias. De este modo, no solo mejoran la calidad de vida de los enfermos en sus fases finales sino que también representan un apoyo para sus allegados en este duelo.
Se calcula que unos 40 millones de personas al año precisa de cuidados paliativos, de las que el 78 % vive en países de ingreso bajo e ingreso medio, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). No obstante, alerta la institución sanitaria: solo un 14 % de estas personas que necesitan asistencia paliativa la reciben.
Funciones de un médico paliativo
La filosofía de los cuidados paliativos nació en los años 60 en Londres, según explica la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL). Su principal objetivo es lograr que los pacientes mantengan sus síntomas bajo control y se encuentren conscientes y sin dolor durante sus últimos días de vida, de tal modo que puedan discurrirlos con dignidad —en su casa o en un lugar lo más parecido posible— y, lo más importante, rodeados de la gente que les quiere.
Para ello, en muchas ocasiones la asistencia de cuidados paliativos se realiza desde un trabajo multidisciplinar donde varios especialistas cuidan de estos pacientes en el tramo final de su vida. De esta forma, los cuidados paliativos ofrecen un sistema de apoyo para los pacientes para vivir tan activamente como les sea posible hasta fallecer.
Hay numerosas enfermedades que requieren de asistencia paliativa, como es el caso de las patologías crónicas, tales como las enfermedades cardiovasculares (38,5 %), el cáncer (34 %), las enfermedades respiratorias crónicas (10,3 %), el sida (5,7 %), y la diabetes (4,6 %); así como la esclerosis múltiple, el Párkinson, la demencia, diversas anomalías congénitas, la insuficiencia renal, la artritis reumatoide, entre otras, según describe la OMS.
La SECPAL insiste en que los cuidados paliativos no aceleran ni detienen el proceso de morir. “No prolongan la vida y tampoco aceleran la muerte. Solamente intentan estar presentes y aportar los conocimientos especializados de cuidados médicos y psicológicos, así como el soporte emocional y espiritual durante la fase terminal en un entorno que incluye el hogar, la familia y los amigos. La atención posterior al fallecimiento es fundamental para las personas más cercanas. Los voluntarios juegan un rol importante en el soporte de la familia”.
Así, entre las funciones de un médico de cuidados paliativos no solo está la esfera física, sino que también estos profesionales sanitarios sirven de apoyo psicológico a los pacientes y familiares para afrontar el proceso.
Requisitos para ser un médico de cuidados paliativos
Los equipos de cuidados paliativos son multidisciplinares y están constituidos por médicos y enfermeras, por un equipo rehabilitador compuesto por fisioterapeutas o terapeutas ocupacionales, así como por trabajadores sociales y psicólogos en la mayoría de casos.
Entre las aptitudes que debe cumplir un médico de cuidados paliativos, se encontrarían:
- Saber responder a situaciones complejas y profundizar en la ética clínica aplicada a las situaciones terminales mediante los principios de la bioética.
- Desarrollar las competencias esenciales para trabajar con pacientes que padecen alguna enfermedad avanzada o muy grave, o que se encuentran en la fase final de su vida.
- Tratar correctamente el dolor en los pacientes, siendo uno de los síntomas más frecuentes y graves experimentados en este ámbito. Aquí destaca el empleo de analgésicos opiáceos muy extendido en el tratamiento de patologías ya avanzadas y que conllevan un gran dolor para el paciente
- Conocer las posturas de las diferentes sociedades y culturas ante la muerte y su repercusión en la administración de cuidados paliativos.
- Ofrecer un sistema de soporte para ayudar a los pacientes a vivir tan activamente como sea posible hasta la muerte, así como a las familias para adaptarse a la enfermedad o a la hora de atravesar el duelo, con el correspondiente soporte emocional.
La formación, indispensable
En el caso concreto de los médicos de paliativos, en Ecuador actualmente no hay una especialidad en la materia, como sí ocurre, por ejemplo, en Reino Unido. La formación de especialistas médicos en este campo se realiza a través de programas de posgrado ofrecidos por universidades y hospitales. Sin embargo, los cuidados paliativos aún cubren apenas el 3% de la población que los necesita en Ecuador, debido a la falta de recursos y formación especializada.
La falta de formación sobre los cuidados paliativos de los profesionales sanitarios es un obstáculo importante a los programas de mejoramiento del acceso a este tipo de cuidados especiales.
Por eso UNIR ofrece la Maestría en Cuidados Paliativos, para aquellos médicos, enfermeros, psicólogos o trabajadores sociales que se dediquen a los cuidados paliativos y busquen convertirse en profesionales capaces de acompañar en este proceso no solo a los pacientes sino también a sus familias.
Los cuidados paliativos tienen por objetivo mejorar la calidad de vida de los pacientes (adultos y niños), así como de sus allegados cuando afrontan problemas serios de salud o bien una enfermedad potencialmente mortal. Intentan aliviar el sufrimiento, el dolor y otros problemas, sean estos de orden físico, psicosocial o espiritual. Su necesidad será cada vez mayor dada la creciente carga que representan hoy en día las enfermedades no transmisibles y el proceso de envejecimiento de la población