Diseñado inicialmente para la enseñanza de la música, esta metodología ha trascendido a más áreas por sus buenos resultados para enseñar desde edades tempranas.
El método Suzuki es una metodología que fue desarrollada por el pedagogo japonés Shinichi Suzuki a mediados del siglo XX. Inicialmente diseñada para la enseñanza de la música, este método ha ido evolucionando y trascendido las fronteras musicales para convertirse en un enfoque pedagógico utilizado también en otras áreas educativas. La hipótesis del método Suzuki es que cualquier niño, independientemente de su capacidad innata, puede desarrollar habilidades excepcionales a través de una educación adecuada y en un entorno favorable.
Características del método Suzuki
Entre las principales características que hacen de este método una herramienta muy interesante, resaltan:
Aprendizaje temprano
Este método se basa en la creencia de que los niños tienen una ventana de oportunidad única para aprender durante los primeros años de vida. Por lo tanto, se recomienda comenzar la instrucción en edades tempranas, a menudo a partir de los tres años.
Entorno de apoyo
El entorno en el que crece el niño es crucial. Las familias, maestros y compañeros desempeñan un papel fundamental en el proceso de aprendizaje. Los padres deben estar involucrados activamente en las lecciones, creando un entorno de apoyo y participación.
Repetición y escucha constante
Al igual que un niño aprende su lengua materna a través de la inmersión y la repetición, el método Suzuki promueve la repetición constante de piezas musicales y ejercicios. La escucha repetida de las piezas ayuda a los alumnos a internalizar la música y a desarrollar el oído musical.
Enfoque en el oído antes de la lectura
En contraposición a las metodologías tradicionales, donde se comienza con la lectura de partituras, el método Suzuki prioriza el desarrollo del oído musical antes de introducir la lectura musical convencional. Los estudiantes aprenden a tocar de oído antes de aprender a leer partituras.
Aprendizaje en comunidad
El aprendizaje grupal es una parte integral de esta metodología. Los alumnos tienen la oportunidad de tocar juntos, aprender unos de otros y establecer conexiones sociales a través de la música.
Refuerzo positivo
La retroalimentación positiva y el refuerzo son elementos esenciales. Los elogios y la apreciación constante fomentan la confianza y la motivación de los aprendices.
Aplicación del método Suzuki
El método Suzuki ha trascendido su aplicación inicial en la música y se ha implementado en diversas áreas. Algunos ejemplos notables incluyen:
Música
Este método parte de la idea de que la habilidad musical no es un talento innato, sino que puede ser desarrollada a través de una educación adecuada y un entorno de aprendizaje favorable. Se emplea especialmente en la educación musical temprana, apoyándose en la inmersión auditiva y el aprendizaje por imitación, siguiendo un proceso similar al aprendizaje del lenguaje materno.
El método Suzuki en pedagogía es un enfoque innovador que ha demostrado su eficacia en la educación musical y en otros campos. Por eso es una de las cuestiones incluidas en el plan de estudios de la Maestría en Pedagogía Musical de UNIR, con un programa 100% online y reconocido por el SENESCYT.
Idiomas extranjeros
El enfoque en la escucha repetida y la imitación se ha utilizado en la enseñanza de idiomas extranjeros. Los niños pequeños son expuestos a conversaciones y vocabulario en la lengua objetivo, imitando patrones lingüísticos de manera similar a como lo hacen con la música.
Matemáticas
Los conceptos matemáticos se presentan de manera auditiva y visual antes de introducir la notación matemática convencional.
Desarrollo personal
El enfoque en la confianza, la autoestima y la autoexpresión ha llevado a la adaptación del método Suzuki en programas de desarrollo personal para niños para fomentar habilidades sociales, emocionales y creativas.