Solucionar un problema real que haya en el entorno supone una motivación y un aprendizaje significativo de gran relevancia para nuestros alumnos. Veamos en qué consiste el ABR.
Post escrito por la docente de UNIR Ingrid Mosquera Gende.
El aprendizaje basado en retos (ABR), es una metodología que involucra a los estudiantes en el proceso de resolución de problemas reales, y les brinda la oportunidad de aplicar sus conocimientos y habilidades para crear soluciones prácticas y efectivas. en este sentido, los estudiantes asumen un rol activo y protagónico en el proceso de aprendizaje, lo que les permite desarrollar habilidades como la creatividad, el pensamiento crítico y la colaboración.
Se recomienda implementar de forma gradual el aprendizaje basado en retos o Challenge Based Learning (CBL), comenzando con pequeños desafíos que se irán ampliando en duración y complejidad.
Se puede relacionar fácilmente con el aprendizaje basado en problemas, el aprendizaje basado en proyectos, el aprendizaje vivencial y el aprendizaje servicio, recordando en muchos aspectos a este último.
Sin embargo, existen ciertos aspectos que le distingue de ellos, ya que el aprendizaje basado en retos supone la resolución de un problema real mediante una acción concreta, no se trata de un problema diseñado para el aula.
Fases del Aprendizaje Basado en Retos
Al hacer referencia al ABR, suelen distinguirse las siguientes fases:
- Selección del tema. Se plantea un tema genérico que pueda ser investigado desde diferentes puntos de vista, que resulte atractivo para los alumnos y que suponga un reto social. Como ejemplos podríamos nombrar la inmigración, el desempleo o el reciclaje, entre otros.
- Brainstorming y formulación de preguntas. Una vez se haya escogido el tema, se hará una puesta en común en la que los alumnos reflexionarán y formularán preguntas en forma de lluvia de ideas, para llegar a una pregunta troncal que deberá ser reflejo de su interés y de las posibles necesidades sociales de mejora para su comunidad. De ahí surgirá la propuesta del reto.
- Desarrollo del reto. Por medio de preguntas, actividades y recursos se intentará buscar la solución más adecuada al problema encontrado. En esta fase las TIC juegan un papel muy importante para la investigación y la búsqueda de información.
- Comprobación en contexto. Se probará la eficacia de la solución escogida en entornos reales.
- Difusión de resultados. Se compartirán los resultados, dándoles difusión, por ejemplo mediante un vídeo o publicaciones en un blog.
- Evaluación y retroalimentación. La autoevaluación y el aprendizaje a través del error serán parte fundamental de la evolución natural del trabajo. Igualmente habrá evaluación continua por parte del docente o docentes implicados, además de poder existir evaluaciones externas de otros agentes sociales partícipes en la consecución de los objetivos marcados. Se contará con instrumentos de evaluación formal e informal.
Principales Beneficios del Aprendizaje Basado en Retos
Recopilando algunas de las ideas esbozadas, se pueden destacar, como beneficios del aprendizaje basado en retos:
- Aumento de la motivación de los alumnos.
- Comprensión profunda del material de estudio.
- Aprendizaje activo con protagonismo de los estudiantes.
- Desarrollo de competencias sociales: empatía, implicación, cooperación y colaboración.
- Mejora en la capacidad de escucha y expresión.
- Interacciones reales con agentes externos al propio centro educativo.
- Conexión con el mundo real y con el entorno de la comunidad.
- Responsabilidad en la búsqueda de soluciones, desarrollando la autonomía y la autoestima.
- Potenciación de la creatividad y el pensamiento crítico.
- Aceptación de los errores y del fracaso como parte necesaria del aprendizaje.
- Aprendizaje personalizado, al poder tener alumnos trabajando en retos de diferentes grados de dificultad dentro de la misma clase.
- Adaptabilidad a diferentes etapas educativas.
Diversos estudios respaldan la eficacia del Aprendizaje Basado en Retos como una metodología que potencia el rendimiento académico y las habilidades profesionales. Un estudio realizado en Ecuador, por ejemplo, demostró que la implementación del ABR en estudiantes de Pedagogía de la Actividad Física no solo mejoró su rendimiento académico, sino que también les permitió desarrollar competencias profesionales más sólidas durante su formación universitaria. Este tipo de evidencia científica refuerza la validez de esta metodología como una herramienta educativa eficaz.
Desafíos en la implementación del ABR
Como dificultades, ya comentadas para propuestas similares, el tiempo de dedicación docente es amplio, al sobrepasar los límites temporales y espaciales del propio centro, además de suponer una necesaria coordinación con otros profesores participantes, en caso de haberlos, y con los correspondientes agentes sociales implicados.
Añadido a ello, se precisa de un conocimiento del uso de las tecnologías para el que a veces podemos no estar preparados. También se debe conseguir integrar los contenidos, objetivos, competencias y demás elementos del currículo en nuestra propuesta, algo que no siempre resulta sencillo, por ejemplo en el caso de la evaluación, que se nos puede quedar corta, en su formato más tradicional, para valorar el trabajo realizado.
Pequeños pasos para grandes cambios: fomentando la conciencia y el compromiso
Como he indicado anteriormente, no te pongas, ni les pongas, grandes retos para empezar. La detección de un problema ya no es tarea fácil, mucho menos lo es la reflexión sobre el mismo o la búsqueda de posibles soluciones. Pero, en una sociedad en la que muchos vamos por la calle con la cabeza metida en nuestros móviles, mirar a los lados y descubrir que hay cuestiones importantes por resolver es fundamental y necesario para construir una sociedad más solidaria, cívica y comprometida.
Por ello, resulta esencial, y diría incluso que urgente, hacer conscientes a nuestros alumnos de que pequeños pasos en la buena dirección pueden marcar la diferencia para mejorar nuestro entorno. Eso, como dice el anuncio, no tiene precio.
Más información
Tecnológico de Monterrey (2016). Aprendizaje basado en retos. EduTrends. Recuperado de: https://observatorio.tec.mx/edutrendsabr