La normativa se implementa para asegurar la inclusión educativa de personas con discapacidad en todos los niveles del Sistema Nacional de Educación. Directrices internacionales y experiencias formativas de éxito sirven de referencia.

Todas las personas, independientemente de su situación de vulnerabilidad o discapacidad, deben tener derecho a las mismas oportunidades de acceder a la educación. Los países procuran en sus sistemas educativos que sea así de forma universal y equitativa, promoviendo la inclusión y eliminando cualquier barrera, incluida la física, que impida el desarrollo integral.
En el Ecuador, informes nacionales sobre la oferta educativa para personas con discapacidad que maneja el Ministerio de Educación (MINEDUC) resaltan que se han implementado modelos de gestión y atención educativa especializados para niños y niñas en edad escolar con rezago o desfase educativo moderado o significativo. Estos patrones buscan garantizar una educación inclusiva y de calidad, adaptada al contexto social, cultural y las necesidades específicas de los estudiantes.
En la actualidad, tales objetivos pretenden cumplirse tras la revisión de la normativa conocida como ‘Acuerdo Ministerial No. MINEDUC-MINEDUC-00025-00002-A’, la cual establece mecanismos específicos para la inclusión de personas con discapacidad en todas las instituciones educativas de la nación, preservando la igualdad y la no discriminación.
El Acuerdo impulsado desde el MINEDUC es claro a la hora de significar la paridad de oportunidades para todos los estudiantes, independientemente de su origen, género, condición socioeconómica o cualquier otra característica personal. En cuanto a su aplicación, la medida afecta a instituciones fiscales, fiscomisionales, municipales y particulares, abarcando tanto la oferta educativa ordinaria como extraordinaria.
Directrices internacionales
Las tendencias de cómo se aborda esta demanda social a nivel internacional sirven también para alimentar una hoja de ruta nacional. El documento ‘Mejor Educación para Todos: Un Informe Global’ de Inclusion International, red global de organizaciones que defienden los derechos de las personas con discapacidad intelectual, revela que menos del 5% de los niños con discapacidad en muchas partes del mundo terminan la escuela primaria. Este estudio pone de relieve la importancia de la educación inclusiva no solo para los estudiantes con discapacidad, sino también para la comunidad en general, al favorecer la diversidad y la cohesión social.
La Cumbre Mundial sobre Discapacidad 2022 ya subrayó la necesidad de compromisos concretos para mejorar la inclusión educativa. Durante esta cumbre, se generaron más de 1.400 nuevos compromisos para cambiar las vidas de las personas con discapacidad, destacando la educación como un derecho fundamental.
Perspectiva desde la formación
En Ecuador, la normativa incluye adaptaciones curriculares, tecnológicas y físicas para facilitar la inclusión de estudiantes con necesidades educativas específicas. Además, promueve la formación y el apoyo continuo a los docentes para asegurar una educación de calidad y equitativa.
UNIR tiene una gran vocación social e inclusiva y sus programas de estudios ponen al alumno en el centro del aprendizaje.
En este sentido, la oferta educativa en el ámbito online amplía exponencialmente las posibilidades. La Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), líder en educación en línea en español, ofrece programas de estudios que inciden en poner al alumno en el centro del aprendizaje desde la visión del docente, con maestrías como Docencia Superior Universitaria o Educación Inclusiva e Intercultural.
Desde la normativa ecuatoriana también se establecen protocolos de actuación encaminados a la evaluación y ubicación de estudiantes con discapacidad, con el fin de que reciban el apoyo necesario para nivelar sus conocimientos y habilidades, así como permitiéndoles reincorporarse al grado correspondiente a su edad. El proceso debe contemplar la identificación y eliminación de barreras a través de programas especiales facilitadores para la escolarización regular y la inclusión efectiva bajo un aprendizaje autónomo y colaborativo.
La regulación vigente en Ecuador ofrece un enfoque integral y quiere dar un paso significativo de asegurar a todos los estudiantes, independientemente de sus capacidades, la oportunidad de acceder a una educación de calidad y culminar sus estudios con éxito.